38. Turning Tables

El día más oscuro sucedió en la fiesta de cumpleaños de Edgar. Esa noche en mis sueños se me dijo que esa noche me iba a pelear con él, que él ya no me amaba. Primero en ese día fuimos a la cineteca para después ir a un bar en el centro histórico. Entramos bebimos mucho, después vi cómo él tomó a un chico y se beso con él frente a mi. Salí y él tomó nuestras mochilas. ¿Recuerdan a su amigo que me corrió en un bar de Zona Rosa? Pues no lo encontramos afuera. Llevaba muchos amigos, y uno se beso con Armando y conmigo afuera del bar.

Armando quiso comprar un cigarro, después de acabarselo dijo que quería ir al baño. Yo tomé su mochila y le dije que fuera pero que me la dejara. En ese momento que la tomé él se giró rápido, de modo que su mochila se rompió. Me miró con ojos furiosos, y tomo mi mochila y la rompió. En unos segundos cerro su puño me recargo en las escaleras y me dio un puñetazo en la cara. Todo se veía en cámara lenta, ¿que se supone que debería hacer? ¿Debería pegarle también? En ese momento llegó un policía y nos separó. El policía nos quería llevar por desorden en la vía pública. Le tuve que dar dinero al policía para que nos dejará.

Ya después que nos dejó ir, y con la adrenalina más abajo. Sentí como mi corazón estaba roto. ¿Cómo alguien que amas tanto puede hacerte daño? No me dolió su golpe, no me lo dio fuerte. Lo que me partió el corazón y por la cual llore toda la noche, fue su intención de hacerme daño. ¿Como alguien que dice que te ama, te hace algo así? Aún pasado el tiempo escribo esta historia, recordarlo es muy duro para mí, aún pasado el tiempo al recordarlo lloro y duele. Ese día la imagen del chico hermoso se rompió, me decepcionó de una manera que no puede escribirse.

El dijo que nos regresaramos a su casa. Yo le escribí por Facebook a mis amigos, les conté que había pasado y como me sentía. Cerca de donde vive Armando está la casa de Pablo. Así que le dije a Armando que se fuera a su casa y yo iba a ir con Pablo. Pablo me recogió en la esquina y llore mucho con él. Enojado subí una publicación a las redes sociales, contándoles a todos como me había tratado. Subía mis mejores momentos, y quería subir esos momentos oscuros. Les dije a todos que él me había pegado y había roto mi mochila.


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